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reumatologia

Ante el envejecimiento progresivo de la población y el aumento de las fracturas osteoporóticas, los hospitales Trueta y Santa Caterina han puesto en marcha las Unidades de Coordinación para la Prevención Secundaria de Fracturas por Fragilidad (FLS, Fracture Liaison Services). La iniciativa se enmarca en el despliegue del Plan Director de las Enfermedades Reumáticas y del Aparato Locomotor (PDMAL) del Servicio Catalán de la Salud.

Las unidades, lideradas por el Servicio de Reumatología conjunto de ambos centros, tienen como objetivo la detección proactiva de pacientes con fracturas de cadera o vertebrales relacionadas con la fragilidad ósea. El propósito es garantizar un seguimiento especializado y aplicar medidas preventivas para reducir el riesgo de nuevas fracturas y mejorar la calidad de vida de las personas afectadas. Desde enero hasta octubre de 2025 se ha atendido a un total de 458 pacientes.

Aunque el liderazgo clínico y organizativo recae en Reumatología, el funcionamiento de estas unidades se basa en la colaboración estrecha con los servicios de Traumatología, las unidades de Convalecencia y, de manera destacada, con las enfermeras gestoras de casos. Cada hospital cuenta con una de estas profesionales, clave en la detección precoz de los pacientes, la coordinación de las visitas y el establecimiento de itinerarios de seguimiento personalizado y continuado.
Este enfoque multidisciplinario permite optimizar los recursos sanitarios y reducir tanto la morbilidad como la mortalidad asociadas a las fracturas por fragilidad, apostando por un modelo preventivo, integral y sostenible.

Circuitos coordinados y adaptados a cada centro

El modelo implantado parte de una base común, aunque los circuitos se han ajustado a las necesidades específicas de cada hospital. Se ha diseñado una agenda asistencial compartida entre todos los profesionales implicados, integrada en la historia clínica para asegurar la continuidad y la trazabilidad de los casos.

Compromiso con los objetivos de salud pública

Con la puesta en marcha de las unidades FLS, los centros cumplen el objetivo PDMAL-2 relativo a su creación y avanzan hacia la segunda fase del proyecto: garantizar el seguimiento activo de los pacientes con fracturas de cadera y vertebrales dentro de estas unidades especializadas.

Refuerzo de la calidad asistencial y la prevención

El Servicio de Reumatología de los hospitales Trueta y Santa Caterina reafirma su compromiso con una atención cercana, de calidad y basada en la evidencia científica. Las nuevas unidades ponen de manifiesto la importancia de la coordinación entre servicios y perfiles profesionales para afrontar los retos sanitarios derivados del envejecimiento de la población.
Con esta iniciativa, ambos centros consolidan una estrategia sólida y sostenible para prevenir las fracturas por fragilidad, situando al Servicio de Reumatología como referente en el abordaje integral de las enfermedades osteoporóticas.

El Servicio de Reumatología del Hospital Universitario Dr. Josep Trueta y del Hospital de Santa Caterina (Institut d’Assistència Sanitària) ha sido reconocido con la certificación SpACE, un distintivo de excelencia que avala la calidad asistencial en el diagnóstico y tratamiento de la espondiloartritis axial (EspA-ax), una enfermedad inflamatoria crónica que afecta la columna vertebral y puede causar dolor intenso, rigidez y pérdida de movilidad. La consulta especializada en esta patología atiende cada año a una media de 600 pacientes.

El acto de entrega de la certificación tuvo lugar ayer en las instalaciones del Institut d’Assistència Sanitària. Asistieron la gerente del IAS y del Hospital Trueta, Àngels Morales; el past president y miembro de la Junta Directiva de la Sociedad Española de Calidad Asistencial (SECA), Manel Santiñà; la directora médica del Hospital Santa Caterina, Mireia Bosch; la directora médica del Hospital Trueta, Elena Álvarez; la coordinadora del Servicio de Reumatología, Patricia Reyner; y la médica adjunta del servicio, Teresa Clavaguera, además de representantes de los laboratorios Novartis, que han acompañado con su experiencia durante el proceso de certificación.

Este reconocimiento, que acredita al servicio con el nivel avanzado —uno de los más altos posibles—, ha sido posible gracias al trabajo impulsado por la Dra. Teresa Clavaguera, reumatóloga del servicio, quien ha liderado el proceso de acreditación y que, junto con el Dr. Lobo, son los responsables de la Unidad de Espondiloartritis. El servicio está dirigido clínicamente por la Dra. Patricia Reyner, que coordina al equipo de profesionales que trabajan conjuntamente en ambos centros hospitalarios.

La Norma SpACE, impulsada por la Sociedad Española de Calidad Asistencial (SECA), establece 14 estándares que evalúan la calidad de la atención, desde el diagnóstico precoz y el trabajo multidisciplinar hasta los resultados de los tratamientos, la seguridad y la satisfacción de los pacientes.

Este certificado reafirma el compromiso del Servicio de Reumatología de los hospitales Trueta y Santa Caterina con una atención personalizada, basada en la evidencia científica y centrada en la mejora de la calidad de vida de los pacientes, y lo consolida como un centro de referencia a nivel estatal en el abordaje de esta patología.

La importancia del diagnóstico precoz

La espondiloartritis axial es una enfermedad crónica que afecta principalmente a las articulaciones de la columna vertebral y las sacroilíacas. Forma parte del grupo de las espondiloartritis y puede extenderse a otras zonas del cuerpo, provocando dolor y rigidez, especialmente en la parte baja de la espalda y en reposo, con una evolución progresiva que puede derivar en daño estructural y discapacidad si no se trata a tiempo.

También puede afectar a otras articulaciones (como rodillas, caderas o hombros) y órganos como los ojos (uveítis), la piel (psoriasis) o el intestino (enfermedad inflamatoria intestinal). A menudo se diagnostica con retraso, ya que sus síntomas pueden confundirse con dolores mecánicos de espalda. Un diagnóstico precoz es esencial para prevenir el daño permanente y mejorar el pronóstico funcional del paciente. La enfermedad suele aparecer antes de los 40 años y es más frecuente en hombres, con un claro componente genético.

Un servicio integrador y de referencia

El Servicio de Reumatología de los hospitales Trueta y Santa Caterina está dedicado al diagnóstico y tratamiento de enfermedades no quirúrgicas del aparato locomotor. Incluye tanto patologías inflamatorias (como la artritis reumatoide, la artritis psoriásica o la espondilitis anquilosante), como enfermedades degenerativas (artrosis) o metabólicas (osteoporosis). También abarca el tratamiento de enfermedades autoinmunes sistémicas (lupus, esclerosis sistémica, síndrome de Sjögren, miositis o vasculitis), síndromes autoinflamatorios pediátricos y diversas enfermedades minoritarias del tejido conectivo y del hueso.

El servicio integra al equipo de reumatólogos de ambos hospitales y trabaja de manera coordinada, compartiendo conocimientos y recursos. Su prioridad es ofrecer una atención cercana y de calidad, acompañando a los pacientes a lo largo de todo el proceso diagnóstico y terapéutico.

La Unidad se ha consolidado como referente para el diagnóstico y tratamiento de la uveitis en la demarcación de Girona gracias a su equipo multidisciplinario, formado por especialistas en oftalmología, reumatología y medicina interna

 

La Unidad Funcional de Uveitis e inflamación Ocular del Hospital Universitari de Girona Dr. Josep Trueta y del Hospital de Santa Caterina ha consolidado su capacidad asistencial con más de 700 personas atendidas desde su puesta en marcha, el abril de 2017. De hecho, desde entonces y hasta el 16 de agosto, 739 nuevos usuarios ya habían visitado la Unidad, con cerca de 2.000 asistencias entre visitas diagnósticas y visitas de seguimiento. La Unidad está formada por un equipo de profesionales de ambos centros, especialistas en oftalmología, reumatología y medicina interna, puesto que el abordaje multidisciplinario es fundamental para tratar una patología que supone la tercera causa de ceguera en el Estado español. Su tratamiento depende del tipo de uveitis, que puede ser causada por enfermedades autoimmunitarias, infecciones o traumatismos, a pesar de que en algunos casos no se conoce el origen concreto.

Los profesionales atienen la consulta en el Centre Sanitari Güell de Girona y al de Santa Caterina, donde los pacientes son visitados por los diferentes especialistas en una misma asistencia. Precisamente esta atención conjunta propicia una valoración integral del paciente que se traduce en una reducción del tiempo de diagnóstico y, en consecuencia, en un tratamiento más precoz.

El año 2023 la Unidad hizo 418 asistencias y atendió 175 pacientes nuevos, una cifra que supera las 371 consultas realizadas el 2022, de las cuales 143 eran primeras visitas. Este incremento de actividad y de primeras visitas ha estado constando desde 2017, hecho que se atribuye a la consolidación y el conocimiento de la Unidad como referente para el abordaje de la uveitis en la Regió Sanitària Girona, cosa que favorece el hecho que muchos oftalmólogos deriven pacientes cuando detectan un caso de uveitis que puede ser grave. En este sentido, la previsión es volver a superar las 400 visitas este 2024, teniendo en cuenta que hasta mediados de agosto ya se han hecho 340 visitas a la Unidad Funcional de Uveitis, de las cuales 118 han estado de pacientes que se visitaban por primera vez.

Una patología que produce ceguera

La Unidad atiende pacientes de todas las edades, y es la franja de edad situada entre los 45 y los 64 años la de mayor incidencia (un 25% en 2023). Los principales síntomas de esta patología son la pérdida de visión, el dolor ocular o el ojo rojo. La Unidad dispone de la equipación y de las técnicas necesarias para diagnosticar el tipo de uveitis —anterior, intermedia, posterior o panuveítis— y establecer el tratamiento más adecuado, generalmente mediante medicación en forma de colirios, oral o inyectable.

A pesar de ser la tercera causa de ceguera previsible en el Estado (su incidencia en los países desarrollados oscila entre los 17 y los 52 nuevos casos el año por cada 100.000 habitantes), la uveitis es una enfermedad todavía fuerza desconocida por la sociedad. Es causada por la inflamación de una capa que envuelve el interior del globo ocular y que recibe el nombre d‘úvea. Esta capa ocular está en contacto con varias estructuras del ojo, entre las cuales hay la retina, y se trata del tejido con más vasos sanguíneos del organismo.

La uveitis está vinculada principalmente a enfermedades autoimmunitarias, que son aquellas en que el sistema inmunitario propio reacciona contra el organismo. En el caso de la Unidad, esta fue la causa de la enfermedad en el 47,2% de los casos tratados, según datos recopilados durante el periodo 2017-2022. Mediante un tratamiento apropiado se puede mantener la enfermedad controlada, a pesar de que hay que hacer seguimiento para evitar nuevos brotes. La segunda causa más frecuente de la uveitis son las infecciones, como por ejemplo la toxoplasmosi o el herpes, puesto que el úvea es especialmente vulnerable a causa de su gran vascularización. Entre el año 2017 y el 2022, el 27,5% de los casos tratados por la Unidad fueron motivados por infecciones. En estos casos, el tratamiento se basa en la administración de antibióticos, antivirales u otro tipo de medicación que permita hacer remitir la infección.

La experiencia acumulada por la Unidad durante los últimos siete años ha permitido arreciar las herramientas para el diagnóstico y el tratamiento de la uveitis en la Regió Sanitària Girona. También ha aumentado en personal, ha tenido mejoras técnicas (Optomap), cumple los estándares de calidad publicados y participa en proyectos de investigación multicéntricos internacionales (estudio IBERSOS). Como última novedad, ha ampliado su cartera de servicios asistenciales con la incorporación más reciente de circuitos como por ejemplo la criba oftalmológica de la artritis idiopática juvenil, el tipo de artritis más habitual en niños menores de 16 años, que puede manifestarse como una uveitis sin mostrar síntomas.